lunes, 18 de junio de 2007

Preludio

Por Salma Corona


El ángel contempló la oscura ciudad desde la cornisa del piso 70. A esa hora sólo se escuchaba el viento y el eco vibrante de una sirena que anunciaba dolor y tragedia entre los hombres. El ángel suspiró. ¿Cuánto tiempo había pasado desde la primera vez que vió este mundo material?...siglos y siglos habían pasado desde que Él, inició el plan universal de la vida...

El ángel miró al cielo, no había estrellas que guiaran al errabundo caminante y pese al alumbrado eléctrico la oscuridad cada vez era más profunda. El tiempo había llegado. Lo curioso era que los hombres parecían no notarlo. La humanidad se encontraba ciega, en medio de una oscuridad sin precedentes. Sólo quedaban algunos cuantos puntos de luz, que cual faros en medio del mar, servían como refugio y guía de los espíritus sedientos de luz.

Una sombra furtiva llamó su atención. La sombra se movía con rapidez y sigilo, pegada a las paredes, deteniéndose para otear el viento. El ángel desplegó sus enormes alas, y antes de que terminara un suspiro, se encontró frente a frente con la sombra, quien al verlo emitió un agudo chillido.

— Oscuro ser de las tinieblas, ¿cómo osas pasar por los dominios de mi padre?, preguntó el ángel.


— ¿Los dominios de tu padre?, todavía falta mucho tiempo para que eso suceda, y mientras tanto, estos son los parajes de mi Señor — contestó la sombra.

— Sabes que no esta permitido que deambules en este mundo —dijo el ángel mirando a la sombra con dureza —regresa por el camino por el que has llegado y lleva contigo la maldad y pena que esparces al andar...

Antes de que el ángel terminara la oración, la sombra se abalanzo sobre él. Garras y dientes buscaban al ángel. Con un veloz movimiento el ángel desenvaino su blanca espada y con un certero movimiento atravesó a la sombra. El demonio quedó reducido en una espesa nube de humo que se deshizo en el aire.

El ángel guardo su espada, miró al cielo y elevo una plegaria a Dios. El tiempo había llegado.

1 comentario:

Salvatore dijo...

Pues como siempre muy interesante la manera en que arranca esta historia tuya.
Me da mucho gusto ver que has estado subiendo cosas a tu blog.
Me parece -como te comenté en principio- que este espacio puede darte muy buenas herramientas para ponerte a escribir de una manera más regular.
Te mando un abrazo y te comento que pondré una liga en mi espacio, para que la gente comience a ver tu estupendo trabajo.
Por cierto, a ver si nos vemos la semana que viene, para ir a platicar: ahora me toca a mí disparar el cafesito.